"Recuperación activa para todos..."

En la etapa de hoy con Valverde, maillot oro. (Foto: lavuelta.com)

Estamos en Ciudad Real, después de un pequeño traslado desde el final de etapa. Compartimos hotel con el Columbia (ganadores de la etapa de hoy... y de unas cuantas) y el Cervélo.

Mucha y necesaria tranquilidad por parte del pelotón... sobre todo yo, después de lo de ayer. Las fuerzas empiezan a escasear y hoy el grupo se ha dado un pequeño respiro, parece como si nos leyésemos la mente los unos a los otros en la salida. Digo pequeño respiro porque no ha sido del todo. Hemos tenido la típica etapa -como se suele decir en el vocabulario ciclista- "pestona", apenas kilómetros llanos, todo ha sido un subir y bajar... hasta algún que otro puerto no puntuable, repechos que nunca acababan y de cierta entidad, con bajadas prolongadas...

La verdad es que -como os digo- quizá ha sido mi primer día algo tranquilo en el pelotón en lo que llevo de Vuelta. A la vez que daba pedales he ido conversando con los compis del equipo y -entre otros- con Adrián Palomares, un tío majete, o con Alessandro Ballan. Con este último además de intercambiar impresiones durante la carrera... ya en la salida se me acercó y me dice "hoy nada de guerra, hoy tranquilos..."

Precisamente antes de comenzar la etapa otra vez hemos estado recibiendo felicitaciones por parte de compañeros de profesión, del director de la Vuelta, de los aficionados y de la prensa en general por el trabajo realizado en la ronda española. Prueba de ello ha sido ver a mis compañeros Ezequiel y David García en el podium recibiendo el premio como mejor equipo. Pero esto no ha acabado hoy; al contrario, tenemos que defender este galardón con uñas y dientes, seguir en la misma línea... y luchar hasta Madrid...

El equipo, con la Mezquita y la Catedral de Córdoba al fondo